PALABRA DE DIOS

EXODO 20:2-5  - IDOLATRIA.- Al dar los Diez Mandamientos Dios dijo: Yo soy Jehová tu Dios. No  tendrás dioses ajenos delante de mí.  No te harás imagen, ni ninguna semejanza de cosa que esté arriba en el Cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra; no te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen.

1 CORINTIOS. 3: (11) Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. (12) Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, (13) la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cual sea, el fuego la probará. 

San JUAN. 3:36.  El que cree en  el Hijo, tiene vida eterna;  más, el que es incrédulo al Hijo,  no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.

Los versículos son cortos, mas llenos de relevancia,

son Palabras del Señor, y aquí no cabe ignorancia.

Jamás seremos  cristianos, sin  conocer  Su  Palabra.

¡Hay que aceptar al Señor, para que Su Puerta se abra!

Nuestras  conductas son  rectas, siguiendo las escrituras.

 Huye de las obras  tercas,  y de  las  palabras  duras.

Si quieres seguir a Cristo, tienes que cambiar de vida,

y hay que obrar con más amor, para curar las  heridas.

El  corazón  sin  amor,  es  un  potro  desbocado,

que no comprende el dolor, del que vive equivocado.

El amor son mil virtudes,  y  todas  de  gran  valor.

El amor es algo “inmenso”, que nos lo dio el Salvador.

Cristo vino con amor, y nos salvó con Su vida.

Dio Su Sangre en una cruz, para curar nuestra herida.

Hay muchos que lo desprecian, y no adoran al Señor,

y se aferran a una imagen, que es causa de gran dolor.

Los que adoran una imagen, practican la idolatría,

y están de espaldas a Cristo, el Salvador de la vida.

Si quieres la salvación, tienes que rendirte a Cristo;

pero si andas con “estampas”, la salvación ya la has visto.

¡Solo existe un salvador, y es el Divino Maestro!

¿Por qué no le adoran todos, sabiendo que es Señor nuestro?

¡Por intereses mundanos,  hay  miles de religiones

que fundamos los humanos, sin entrar en más razones.

Cecilio García Fernández.