El que cree en el Hijo, tiene vida eterna, más el que es incrédulo al Hijo, no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.- San Juan 3:36.
No tenemos más que un Dios,
del cual son todas las cosas,
y un solo Señor, - Jesús -
y aquí termina la cosa.
Jesús fue quien dio la vida
por salvar al pecador;
dando Su Sangre Bendita,
con exceso de dolor.
Hay quien confía en María
para eterna salvación.
No creer esa osadía,
que lleva a la perdición.
María fue pura y Santa,
y fue una mujer bendita;
pero quien salva es Jesús,
y además nos resucita.
Él nos da la Salvación,
porque su Sangre es bendita.
¡Y no hay otra solución!
Si no le aceptas, claudicas.
Nadie puede ir al Padre,
sin permiso del Maestro.
Aquí no vale la Madre.
Vale Jesús, por ser nuestro.
Todo aquel que cree en Cristo,
ya tiene la Salvación.
Los demás, ni me los nombres;
pero en ninguna ocasión.
Por Cristo hay que padecer,
como dice Su Palabra.
Y tienes que obedecer,
para que Su Puerta se abra.
Bienaventurados somos,
los que oímos su promesa
y él nos recompensa a todos,
sentándonos en su Mesa
Si somos vituperados,
por defender a Jesús,
somos bienaventurados,
pues nuestra muerte es la Cruz.
No te harás jamás imagen,
de ninguna semejanza.
de todo lo que está arriba,
y obra siempre con templanza.
Con el amor, tienes gozo,
tienes paz y tolerancia,
benignidad y bondad,
y también tienes templanza.
Con el amor tienes fe,
mas también hay mansedumbre.
Aquí está el amor de Dios,
y Dios jamás nos confunde.
Estos dones que te cito,
son del Espíritu Santo;
por eso Dios es Bendito,
que nos cubre con Su manto.
Dios nos ha dado a Su Hijo,
para nuestra salvación;
por eso Cristo nos dijo:
¡Tienes que pedir perdón!.
¿Qué es menester que yo haga,
para tener salvación?
Cristo sabes que te ama;
pues tú, ¡pídele perdón!
Solo hay que adorar a Cristo.
Los demás.., son pecadores;
pero tienes que andar listo,
¡que hay falsos imitadores!
Los pecados cometidos
los tienes que confesar.
¡No te metas en más líos!
Solo Cristo va a salvar.
La Sangre de Jesucristo
nos limpia todo pecado.
Los hombres están muy vistos.
No vivas equivocado.
Jesús ha rogado al Padre,
pidiendo Consolador,
que es el Espíritu Santo,
el que nos calma el dolor.
Las imágenes que adoras,
fueron hechas por humanos;
pero las desecha Cristo,
el Señor a quien amamos.
Pablo nos dice en Corintios,
que un ídolo nada es,
y que no hay más que un Dios Santo,
En esto base tu fe.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario